Hola amigos.
Por los que no me conocen, me presentaré. Me llamo Josep Mª Parets y soy aeromodelista desde que tenía 14 años y aficionado a todo lo que vuele desde toda mi vida.
A escasos 80 minutos de Vic, localidad donde resido, se encuentra el Centro de Paracaidismo Costa Brava situado en Empuriabrava (Girona). Es uno de los tres centros de paracaidismo más importantes del mundo, y sólo por citar algunos ejemplos mencianaré que allí tiene instalada su base los miembros del "Proyecto Alas" que cruzaron el Estrecho en caída libre con unos trajes especiales patrocinados por Red Bull, así como tambien allí vuela un hombre que se lanza desde un avión con unas alas en la espalda y en las cuáles incorpora varias turbinas rc de keroseno que arranca en pleno vuelo y que le empujan varios minutos antes de pararlas y abrir el paracaídas.
Pues bien, cada año en verano desde hace ya un montón de años me acerco algún día allí a ver cómo se lanzan los paracaidistas y es impresionante verlos cómo bajan. Recientemente celebraron el salto 1 millón siendo el primer aeroclub del mundo que lo consigue. Cuando estás allí alucinas con la cantidad de gente que se lanza sin parar al largo de todo el día, siendo en verano cuando más saltos se realizan al tratarse de un aeroclub situado en una localidad costera situada al lado mismo de la conocida Roses.
Te encuentras con cantidad de extranjeros que vienen a entrenarse aprovechando el buen clima y la playa, además de otros del país así como la gente que realiza un bautismo de vuelo en tándem. Después de muchos años de verlo, me decidí a probarlo y hoy he realizado uno de mis sueños y la experiencia ha sido fantástica, he descargado adrenalina como nunca. Os dejo algunas fotos para que lo disfrutéis al igual que lo he disfrutado yo.
En el aeroclub tienen dos aviones propios (DHC-6 Twin Otter y Pilatus Superporter) más los que se traigan los extranjeros procedentes de sus clubes de origen. Hoy sólo volaba el DHC-6 y es impresionante cómo en menos de 15 minutos te sube hasta 4000 metros y allí te lanzas pegado con un arnés al monitor y junto a nosotros el cámara que se encarga de no perderse detalle. Bajas durante unos 50 segundos en caída libre a unos 200 km/h hasta llegar a 1500 metros aproximadamente. Allí te abre el paracaídas y bajas relajadamente durante aproximadamente 4 minutos hasta aterrizar en la hierba.
La experiencia ha sido increíble, se la recomiendo a todo el mundo destacando que hemos saltado del avión y como estás a tantos metros del suelo te encuentras como flotando en el aire a pesar de estar bajando a toda castaña, luego el monitor al ver que me lo estaba pasando genial me ha hecho dar un par de volteretas. Posteriormente cuando abre el paracaídas notas un freno brutal en tu cuerpo y experimentas una cantidad de "G" que es indescriptible y cuando vas bajando con el paracaídas abierto a tan solo 20 km/h (cuando unos segundos antes ibas a 200 km/h)aprovechas para disfrutar del hermoso paisaje que se divisa de la Costa Brava y de toda la zona norte del Ampurdán y del Cabo de Creus. Finalmente cuando tocas el suelo dentro de mi cabeza sólo se oían las expresiones "impresionante", "brutal", y "voy a repetir".
Espero que encontréis interesante mi relato y que os animéis a probarlo, de verdad que la experiencia merece la muchísimo la pena y apetece repetir. ´
Un abrazo a todos.
Josep Mª Parets
Por los que no me conocen, me presentaré. Me llamo Josep Mª Parets y soy aeromodelista desde que tenía 14 años y aficionado a todo lo que vuele desde toda mi vida.
A escasos 80 minutos de Vic, localidad donde resido, se encuentra el Centro de Paracaidismo Costa Brava situado en Empuriabrava (Girona). Es uno de los tres centros de paracaidismo más importantes del mundo, y sólo por citar algunos ejemplos mencianaré que allí tiene instalada su base los miembros del "Proyecto Alas" que cruzaron el Estrecho en caída libre con unos trajes especiales patrocinados por Red Bull, así como tambien allí vuela un hombre que se lanza desde un avión con unas alas en la espalda y en las cuáles incorpora varias turbinas rc de keroseno que arranca en pleno vuelo y que le empujan varios minutos antes de pararlas y abrir el paracaídas.
Pues bien, cada año en verano desde hace ya un montón de años me acerco algún día allí a ver cómo se lanzan los paracaidistas y es impresionante verlos cómo bajan. Recientemente celebraron el salto 1 millón siendo el primer aeroclub del mundo que lo consigue. Cuando estás allí alucinas con la cantidad de gente que se lanza sin parar al largo de todo el día, siendo en verano cuando más saltos se realizan al tratarse de un aeroclub situado en una localidad costera situada al lado mismo de la conocida Roses.
Te encuentras con cantidad de extranjeros que vienen a entrenarse aprovechando el buen clima y la playa, además de otros del país así como la gente que realiza un bautismo de vuelo en tándem. Después de muchos años de verlo, me decidí a probarlo y hoy he realizado uno de mis sueños y la experiencia ha sido fantástica, he descargado adrenalina como nunca. Os dejo algunas fotos para que lo disfrutéis al igual que lo he disfrutado yo.
En el aeroclub tienen dos aviones propios (DHC-6 Twin Otter y Pilatus Superporter) más los que se traigan los extranjeros procedentes de sus clubes de origen. Hoy sólo volaba el DHC-6 y es impresionante cómo en menos de 15 minutos te sube hasta 4000 metros y allí te lanzas pegado con un arnés al monitor y junto a nosotros el cámara que se encarga de no perderse detalle. Bajas durante unos 50 segundos en caída libre a unos 200 km/h hasta llegar a 1500 metros aproximadamente. Allí te abre el paracaídas y bajas relajadamente durante aproximadamente 4 minutos hasta aterrizar en la hierba.
La experiencia ha sido increíble, se la recomiendo a todo el mundo destacando que hemos saltado del avión y como estás a tantos metros del suelo te encuentras como flotando en el aire a pesar de estar bajando a toda castaña, luego el monitor al ver que me lo estaba pasando genial me ha hecho dar un par de volteretas. Posteriormente cuando abre el paracaídas notas un freno brutal en tu cuerpo y experimentas una cantidad de "G" que es indescriptible y cuando vas bajando con el paracaídas abierto a tan solo 20 km/h (cuando unos segundos antes ibas a 200 km/h)aprovechas para disfrutar del hermoso paisaje que se divisa de la Costa Brava y de toda la zona norte del Ampurdán y del Cabo de Creus. Finalmente cuando tocas el suelo dentro de mi cabeza sólo se oían las expresiones "impresionante", "brutal", y "voy a repetir".
Espero que encontréis interesante mi relato y que os animéis a probarlo, de verdad que la experiencia merece la muchísimo la pena y apetece repetir. ´
Un abrazo a todos.
Josep Mª Parets